2020 fue sin duda un año retador, que nos enseñó a no dar nada por hecho. Nosotros empezamos el año como siempre, en nuestra querida Feria de Reyes y con el rumor de que en la lejana China, alguien había largado un pangolín en el puchero y la había liado parda.
Cerrando la feria y con grandes expectativas para el 2020, totalmente convencidos como todos de que sería un gran año, contactamos con Plotteralia para equiparnos con nueva maquinaria. El taller creció en forma y espacio y empezamos a producir novedades, sin saber que pasarían un año en una caja, aguardando por los próximos Reyes.
El COVID nos pilló aún sin haber encontrado Whuan en el mapa. Cosimos millones de mascarillas higiénicas con tejido homologado, regalamos otras tantas entre los comercios de barrio que nos mantenían abastecidos y vendimos todas las que mis manos fueron capaces de producir, gracias a la ayuda del Grifo Verde, salvando así nuestra economía y sobre todo mi cordura.
Hubo tiempo de pintar, descansar, mimarse y ver todo lo que Netflix había parido. Engancharse al deporte y joderse la espalda intentando seguir a una rusa cañera del YouTube haciendo yoga. Dormimos y nos trasnochamos a partes iguales. Montamos planes insignificantes y divertidos para los días interminables y surfeamos todos los estados de ánimo habidos en un ciclo menstrual, en 24 h.
No hice pan ni una vez! Me lo dejé como coartada para bajar al super a por vino y chocolate. En 2020 me hice experta sonriendo con los ojos y gocé bajando el ritmo y saboreando lo cotidiano, aunque ello implicara muchos días de convivir únicamente con mis propias decisiones, las buenas y las malas. Mirar el mar desde la ventana y descubrir a los pajaritos vecinos se convirtió en un respiro y los aplausos y los saludos de los balcones, en las campanadas de las 8.
Cuando por fin pudimos hacerlo, nos lanzamos al mar y tuvimos momentos mágicos. Como te había contado en este post que escribí para Canarias Viaja, 2020 había empezado desbordante de vida y aunque nos quisieron vender orcas en el Médano y delfines en Venecia, nosotros sabíamos que lo realmente fascinante estaba pasando a un palmo de nuestras ventanas.
La vuelta nos alegró tanto, que me propuse hacer un post mensual dedicado a nuestros mejores avistamientos del 2020. Pero la vida post-cuarentena tiene una inercia muy distinta y aunque desde hace 12 meses que no tenemos ferias ni eventos, siento que no he parado. Por eso este año lo he decretado “el año del trabajo descansado”. Estoy hasta el moño de presumir de trabajar sin descanso, así que ese post vendrá con cada estación y con ritmo pandémico.
En un momento de inspiración (no hubo muchos en el 2020) hicimos estos calendarios espectaculares, con la ayuda de nuestro querido Chucho Marichal. ¡Nos quedan solo 12 de la última tirada, así que corre inmediatamente y compra el tuyo, porque de verdad que este hijo mío es guapo a rabiar!
Ya que estamos comenzando el año y la gente pide deseos y regalos a los Reyes y cosas de esas, me gustaría pedirte que nos sigas en Instagram, porque aunque seguimos en una desintoxicación redes, volveremos. Desde las historias voy contando de novedades y ofertas, deambulando entre la costura, el mar y la cocina sin ningún reparo. Me gustan las historias porque diga lo que diga el algoritmo, me siento en libertad de publicar sin pautas, a mi ritmo y a mi bola, de forma espontánea y conversada. Probablemente al señor Instagram eso no le guste nada y me castigue ocultando mis post, para que me vea solo mi mamá y cuatro gatos, así que si quieres ser un gato de mi cuadrilla, síguenos y activa las notificaciones y juntos nos convenceremos de que somos más fuertes que él, o no pero no importa 😊
Te deseo un año tranquilo y que tu cuenta final con el 2020 haya sido positiva a pesar de la incertidumbre y del dolor por los que se han ido.
Nosotros continuaremos creando y buscando maneras de estar en contacto contigo aunque no podamos vernos en eventos. Si quieres pasarte por nuestro showroom en casa, escríbeme y concertaremos una cita. Nos encantará recibirte para que puedas hacer tus compras de forma directa y tranquila desde aquí.
¡Seguimos conectados! Feliz 21
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